Jue. Nov 21st, 2024

Por: Javier Martínez Ferrusca

Libertad de expresión: los muertos y la simulación

La muerte de tres periodistas ha puesto en el ojo del huracán la libertad de expresión y los peligros que a diario vivimos quienes nos dedicamos a esta noble labor; sin embargo, no hay que equivocarse, los políticos solo simulan su pesar por los muertos, ellos detestan el periodismo y más cuando no les favorece, los funcionarios públicos, los partidos y los políticos son quienes le han restado importancia a nuestra labor y quienes menos interés tienen en fortalecerla.

En una semana asesinaron a José Luis Gamboa, en Veracruz; a Margarito Martínez Esquivel y Lourdes Maldonado en Tijuana, Baja California; el caso más indignante para La Mayoría Silenciosa, por haber solicitado ayuda al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, luego de un diferendo laboral con el exgobernador, Jaime Bonilla.

A buen árbol se arrimó, sabiendo el desprecio que el presidente tiene por los periodistas, a quienes ha insultado hasta el cansancio, a quienes ha denostado una y otra vez por exhibir la corrupción en su gobierno, en su familia, el tráfico de influencias y las fortunas inexplicables de sus colaboradores.

López Obrador es el primero que está en contra del periodismo libre, como hombre de “izquierda” detesta la prensa y, si por él fuera, no deberían de existir medios. Los ciudadanos se pueden informar con su conferencia mañanera. No entiende que el periodismo confronta datos, investiga y opina en cualquier país democrático del mundo, y eso es valioso para la ciudadanía.

Si eso hace el presidente, imagine usted lector lo que hacen los alcaldes de cualquier municipio en el país. Todos los partidos políticos han demeritado las investigaciones periodísticas, lejos de darle valor jurídico les han restado importancia, minimizan la labor porque les conviene, muchas investigaciones se han quedado impresas, sin que pase nada más allá de una mala imagen para los señalados. Por sistema han estigmatizado las investigaciones.

Lo nuevo es que a través de las redes sociales, organizan campañas de desprestigio contra los periodistas, miles de boots reaccionan ante las críticas contra los políticos, no importa si es el presidente, un gobernador o un líder de partido, para eso se crearon las granjas, para nivelar la percepción negativas de los políticos y los funcionarios públicos.

Así que no nos engañemos, el pesar y la indignación de nuestros políticos solo son una simulación cada que un periodista muere, su actuar es mediático, los mecanismos de protección para los periodistas son utopía y, eso demuestra su nulo interés por generar mejores condiciones para los medios y sus trabajadores.

Por cierto, se les olvida que el derecho a la información está consagrado en la Constitución, no es una graciosa concesión que ellos hacen a La Mayoría Silenciosa, ni es algo que les convenga de acuerdo a sus intereses mediáticos de imagen y propaganda, los funcionarios y nuestros representantes populares están para atender a los medios y las dudas que sus acciones generen.

El testamento político de Obrador

Quien conozca la Constitución mexicana le dará la importancia que este mismo espacio al tema de la declaración del presidente Andrés Manuel López Obrador, en torno a su testamento político. La Mayoría Silenciosa sabe qué sucederá en caso de que falte un presidente, porque la Carta Magna lo señala, quién se hace cargo y por qué, y si es necesario llamar a nuevas elecciones. Tan, tan.

Couttolenc sigue sin despegar

La falta de un cargo político le afectó demasiado el líder del partido Verde en el Estado de México, José Couttolenc, su aspiración para insertarse en la carrera por la gubernatura sigue sin despegar, lejos de los reflectores de la diputación ha intentado de todo para llamar la atención, se ha subido a camiones, ha recorrido las calles con propuestas poco viables, La Mayoría Silenciosa lo sabe por esa razón, no lo toman en serio.

Couttolenc no calculó perder la diputación, por eso pregonaba que el partido Verde competiría solo en el 2023 por la gubernatura en el Estado de México, tal vez, las encuestas lo obliguen a ir aliado, porque al PRI no le sirve de nada si no le resta votos a Morena en la contienda electoral.