*-Poner un alto a ambiciones de desarrolladores inmobiliarios recomiendan especialistas
Toluca, Estado de México.-El diputado del Grupo Parlamentario de Morena, Max Correa Hernández, coincidió con expertos y activistas en pro del cuidado del agua en el territorio mexiquense, zona centro y norte del país, para que de inmediato se tomen determinaciones viables en el corto, mediano y largo plazo que garantice abasto del vital líquido en los hogares, se realice un manejo transparente y adecuado de presas y pozos, así como de la preservación de zonas boscosas que permiten la recarga de mantos acuíferos.
Y para que eso suceda, precisaron los ponentes, durante el evento convocado por el legislador, se deben establecer procesos efectivos de potabilización de agua, pero sobre todo poner un alto a la ambición de desarrolladores de viviendas y zonas urbanas en general, ya que en estos momentos se están realizando en diferentes sitios de la zona norte del Estado de México, la construcción de miles de viviendas pese a que los proyectos no tienen viabilidad hídrica porque no existe agua en zonas de municipios como Atizapán de Zaragoza y Naucalpan.
En el marco del Foro Binacional: «Intercambio de Experiencias de Rescate de Cuerpos de Agua, Frente a la Crisis del Agua y el Cambio Climático en las Zonas Metropolitanas», realizado en la Cámara de Diputados del Estado de México, Max Correa, recordó que de acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional en el 84% del territorio mexicano se registran diversos grados de sequía.
“Los ríos y cuerpos de agua no deben ser lugares de descarga de desechos humanos e industriales”, enfatizó el legislador quien preside la comisión de Asuntos Metropolitanos de la Legislatura local.
El legislador Max Correa quien también forma parte de la comisión Especial de Seguimiento de la Agenda 20-30 para el Desarrollo Sostenible en la 61 Legislatura estatal, explicó que cuando el agua utilizada no es sometida a un proceso de tratamiento se desencadena contaminación hídrica y con ello extinción de biodiversidad en diversos ecosistemas.
Por su parte, Eduardo Espinoza Medel, Gerente Operativo de la Comisión de Cuenca Presa Madín, órgano ciudadano auxiliar del Consejo de Cuenca, con base en estudios oficiales e históricos, aseguró que la zona del Valle de México está sobre explotada pues “sacan más agua de la recargada de manera natural”.
Aunado a dicha situación, detalló el especialista, se están permitiendo procesos de urbanización como el de 22 mil casas en el municipio de Jilotzingo y 7 mil en Naucalpan. Las consecuencias, advirtió, es un crecimiento urbano insostenible en el corto plazo, así como la devastación de las zonas boscosas de la zona.
En este sentido, recordó que para crear la zona esmeralda de Atizapán de Zaragoza se derrumbaron zonas boscosas y hoy casi 87% de esas viviendas dependen del suministro de agua de presa Madín y Sistema Cutzamala.
Al exponer su visión Miguel Miramontes Lira, vecino de Naucalpan que ha dedicado en los últimos años a combatir jurídicamente la afectación de la Presa Madín, se pronunció a favor de emprender un frente común para detener la ambición económica de los desarrolladores que proyectan miles de casas en dicha zona norte del Estado de México con la complicidad de autoridad municipal y estatal.
“Cuando vienen las elecciones los desarrollos salen como hongos; ahorita les están dando los permisos pese a que no tienen factibilidad de agua”, expreso tras sostener que el gobierno estatal quiere quedar bien con los empresarios del ramo inmobiliario.