Mié. Nov 20th, 2024

Por: Víctor Yáñez

Primero que otra cosa. Feliz año a todos.

Vamos por más éxitos, porque ya lo pasado, pasado.

Una primera reflexión. Qué estará pensando Ana Lilia Herrera Anzaldo, actual presidenta del PRI, para hacerle frente a Morena y sus aliados en los comicios del 2024.

Si bien, el PRI y sus aliados (Nueva Alianza, PAN y PRD) han recuperado algunos espacios perdidos en el 2018, como: Toluca, Metepec, Zinacantepec, Naucalpan, Tlalnepantla, Cuautitlán Izcalli, entre otros más, pero a la fecha esto no ha sido suficiente para equilibrar fuerzas.

En 2021, el PRI y sus aliados se recuperó, porque pasó de un diputado local a 23 y de tres diputados federales a 14 legisladores con representación en el Congreso de la Unión.

Sin embargo, en el 2023, en la elección para gobernador, Morena se impuso frente al PRI y sus aliados y los “barrió”. El Movimiento de Regeneración Nacional ganó por más de medio millón de votos y eso que les “ayudó” Alfredo del Mazo, al hacerse de la “vista gorda” ante los reclamos de los priistas que la estructura de PROCURA, trabajó en favor de los morenistas.

Pero eso ya es otra historia. Hoy en día, la apertura de la dirigencia priista hacia la militancia es un primer paso que es bien visto por quienes buscan reelegirse o iniciar la carrera por una candidatura, pero la duda está sembrada.

Eso será suficiente para que el PRI se reacomode y tenga el tiempo suficiente para delinear las candidaturas de coalición. Se dice que para los ayuntamientos serán más de 88 los que vayan en coalición y en el caso de las diputaciones locales de las 45 en disputar, por lo menos unas 25 irán en alianza.

Ese es el escenario que están pensando plantear para hacerle frente a Morena. Por ello, el PRI debe tener claro que cada región se cuece aparte.

La zona oriente, sin duda es la más peleada por los votos que ahí se concentran, el 65 por ciento del patrón electoral, algo así como 8.9 millones de potenciales electores, por ello los partidos políticos enfocan batería en la zona.

Pero no se pueden descuidar dos zonas fundamentales, la norte mucho menos la sur del Estado de México, porque es ahí donde el PRI y el PRD tienen su fuerza real.

Por ejemplo hay casos particulares que el PRI no puede pasar por alto, porque es la única forma de poder hacerle frente a Morena.

En Ixtlahuaca, la fortaleza priista es real si se observan los resultados de la votación última del 2021.

Para la diputación local, los números hablan por sí mismos: 29,019 votos de la coalición PAN, PRI y PRD; mientras que la votación de Morena fue de 24,063.

Aunque la diferencia entre el PRI y Morena fue de 4,956 votos, existe una diferencia marcada, porque el PRI sin aliados obtuvo 26,695 votos y eso representa más de 2 mil 500 votos frente a los morenistas, por lo tanto se demuestra que la fortaleza del PRI en esa tierra mazahua es real, cuando se trata de disputar el distrito XV.

Es ahí donde Leticia Mejía, gana una de las elecciones más competidas, ya con Morena en el poder.

Otro punto a analizar es la elección de presidente municipal más reciente, la de 2021, donde la coalición PRI, PAN y PRD, obtuvieron 26,753, contra 22,533 de Morena y sus aliados.

Hay necesidad de destacar nombres de los candidatos de hace tres años. Abuzeid Lozano, se impuso frente a Guadalupe Díaz con más de 4,200 votos. Osiel Almazán que fue candidato del PVEM, pero cayó al 3 lugar al lograr casi tres mil votos.

Hay que anotar que pese al trabajo realizado por Juan Luis Solalinde del 2018 al 2021, Movimiento Ciudadano solamente obtuvo 8,112 votos en la elección de 2021.

El electorado no estuvo de acuerdo que Juan Luis Solalinde se reeligiera, quizás por eso dio voto de castigo y respaldó el proyecto de Abuzeid Lozano, quedando en el camino Lupita Díaz, quien estuvo cerca de ganar en los comicios de 2021.

Hay quienes dicen que el PRI ganó en Ixtlahuaca gracias a Joel Sánchez, al dirigir los votos de su partido, el Partido del Trabajo al proyecto de Abuzeid Lozano.

Existen antecedentes de como electorado no le gustan los malos candidatos por ello castigó a Juan Carlos Bautista por el mal gobierno y le dio oportunidad, en 2018 a Juan Luis Solalinde de Movimiento Ciudadano, pero el gusto le duró poco, porque fue debut y despedida.

Hoy, el escenario se ha tornado complicado, derivado del COVID, de las acciones que los alcaldes en turno dejaron de hacer y eso no excluye a Abuzeid Lozano.

Ahora surge en el escenario Sonia Valdés, hermana de Sergio Valdés, quien en algún momento buscó ser alcalde de Ixtlahuaca. Sonia Valdés es actual esposa de Juan Luis Solalinde Trejo, que años atrás fungió como presidenta honoraria del DIF, pero con las siglas de Movimiento Ciudadano y eso lo tiene presente el electorado.

A este hecho se suma que Juan Manuel Trujillo, quien fuera presidente municipal priista, ha encaminado sus pasos a Morena en espera de una oportunidad, pero no sabe que la lista de aspirantes es larga: Guadalupe Díaz, Florencio Cruz, Carlos Augusto Trujillo, Benito Viera, Gabriel Ángeles, Héctor López, entre muchos, muchos más.

Por eso el escenario se torna complicado para el PRI, porque Morena se fortalece con el arribo de Sonia Valdés al Movimiento de Regeneración Nacional que no lleva mucho, pero los más de 6 mil votos representan un gran atractivo y ayuda para cualquier candidato y si es de Morena mucho mejor.

Por ello, a tres años de distancia, los priistas sienten que en la víspera de las elecciones del 2 de junio de 2024 se puede retener la alcaldía de Ixtlahuaca que está en manos del PRI y sus aliados, pero el objetivo que se debe plantear, como premisa máxima: respetar acuerdos, mostrar voluntad política y mantener prudencia y calma y dejar atrás la arrogancia y soberbia para lograr los más de 30 mil votos que se necesitan en esta elección para ganar.

Quién podrían ser los candidatos de la alianza PAN, PRI y PRD para Ixtlahuaca: si se quiere ganar, en primera no se debe pensar en una reelección porque está más que comprobado que al electorado no le gusta, no le agrada que los alcaldes repitan, por eso debe abrirse el escenario para que una mujer pueda encabezar está alianza.

Si en el bando contrario están considerando a una mujer – Sonia Valdés o a Lupita Díaz- por el otro lado, bien podría hacerles frente Lety Mejía, que es una mujer de trabajo, de trayectoria y experiencia política.

El PRI debería ver más allá de sus ojos. Abuzeid Lozano, es un gran activo, pero como alcalde ya dio los resultados esperados y el siguiente paso debe ser hacia arriba, no a un lado ni para atrás.

La juventud de Abuzeid Lozano, tiene que ir aparejada con la de jóvenes políticos como Iván Esquer que también busca crecer y de la experiencia de una mujer que ha servido a su pueblo desde trincheras distintas como lo es Leticia Mejía. Esa es la verdadera fortaleza del PRI que eche mano de los jóvenes y mujeres que han hecho carrera política abrevando experiencia y visión en la región norte del Estado de México.

Ana Lilia Herrera está mostrando talante y talento. Se ha reunido con diputados locales, los ha escuchado, les ha planteado los planes y proyectos que quiere para el PRI y sus aliados, lo mismo pasa con los alcaldes en turno, donde se analiza las posibilidades de cada uno de ellos. Quien puede ganar y quien no, porque dar un paso en falso, significaría caer al vacío y el riesgo es alto y eso lo sabe Ana Lilia Herrera, por lo tanto, cada caso debe tratarse con pinzas.